Informaciones del Consejo General

De lo alto a la izquierda, en sentido horario: iglesia de Phayao, comunidad de Sampran & casa de formación (Ban Betharram, Ban Garicoits), comunidad de Maepon, iglesia de Huay Tong, comunidad di Chiang Mai, comunidad de Ban Pong

En la sesión del 5 de mayo del Consejo General, el Superior General, con su Consejo, dio su aprobación a la reorganización del Vicariato de Tailandia en 6 comunidades y al nombramiento de los 6 superiores de comunidad, para dar curso a la petición del P. Austin Hughes, Superior de la Región Santa María de Jesús Crucificado, y su Consejo.

Comunidad de Chiang Mai (Chiang Mai, MaeTaWar) | Superior: P. Hiran Thomas Klinbuakaew
Comunidad de Maepon (Maepon, Chom Tong) | Superior: P. Suthon Bernard Khiriwathanasakun
Comunidad de Huay Tong | Superior: P. Chokdee John Damronganurak
Comunidad de Ban Pong (Ban Pong & Huay Bong) | Superior: P. Chan John Kunu
Comunidad de Phayao | Superior: P. Arun John Baptist Kano
Comunidad de Sampran (Ban Betharram & Ban Garicoïts) | Superior: P. Phairote Peter Notchachawan

Para favorecer la creación de comunidades vivas y fraternas, el Capítulo General 2011 ha subrayado el papel del superior de comunidad definiendo un nuevo estilo de animación y autoridad. Así dicen las actas del Capítulo General 2011:

« Hemos experimentado en el Capítulo, un verdadero compartir de comunión en el Espíritu. Eso despertó en nosotros el deseo de un nuevo estilo de vida comunitaria en la Congregación basado sobre el diálogo, la escucha, la aceptación de las diferencias, la búsqueda común de la voluntad de Dios. (cfr. RdV 96).
Hemos notado también situaciones de riesgo, para las comunidades: encuentros de comunidad sacrificados en nombre de actividades pastorales, opciones de misión que dispersan…
[70] El Capítulo General pide a cada superior de comunidad que tome en serio la responsabilidad que le es confiada. Cada religioso toma en serio su propia responsabilidad.
Se le confía, en todos los casos, que sea testigo y actor de la vida fraterna. La Regla de Vida lo subraya con fuerza (RdV 175ss, 279ss); se le pide una presencia real, el coraje de dar vida al proyecto comunitario, de acompañar a cada religioso de su comunidad, de vivir su responsabilidad como un servicio. »

En sus esfuerzos para estar más atentos a la vida de la comunidad religiosa, hecha posible por la presencia de un mayor número de religiosos, en su deseo de concentrar fuerzas en los lugares de misión ad gentes, y para asegurar un testimonio cada vez más fiel al estilo de vida en las casas de formación betharramitas, queremos un ministerio feliz y fértil para nuestros superiores de la comunidad y para todos nuestros hermanos de Tailandia. ¡Adelante, siempre!