Día de elección
El 20 de junio es un día importante para los miembros del Capítulo General. Día consagrado a la elección del Superior General y los miembros del Consejo que presidirá la Congregación durante los próximos seis años.
Durante la mañana, los capitulares reunidos en la sala capitular, invocaron el Espíritu Santo con el canto del “Veni Creator Spiritus”. Posteriormente se procedió a la elección del Superior General. La asamblea eligió al P. Gustavo Agín scj renovando su mandato.
Según la tradición, el religioso más longevo hace la pregunta al recién electo superior General, esta vez le tocó al P. Pietro Felet scj, quién con estas palabras se dirigió al recién electo Superior General: “Reverendo Padre Gustavo, el Capítulo General te ha elegido para el Servicio de Superior General, ¿Aceptas esta elección?”. El P. Gustavo aceptó la voluntad expresada por la asamblea capitular. Así la elección fue efectiva.
A continuación, el P. Gustavo leyó la Profesión de Fe y el Juramento de Fidelidad, como exige la Iglesia y nuestra Regla de Vida. Posteriormente fuimos a la capilla para la oración de acción de gracias, durante la cual el P. Gustavo lavó los pies a doce representantes religiosos de todas las Regiones y de todos los Vicariatos de la Congregación, recordando la palabra del Señor: "Si, pues yo, quien soy Maestro y Señor, les he lavado los pies, ustedes también deben lavarse los pies los unos a los otros". (Juan 13, 14).
Por la tarde tuvo lugar la elección de los demás miembros del Consejo General, con el siguiente resultado:
Como Vicario General, el P. Jean-Dominique Delgue scj fue confirmado para un segundo mandato.
Como Ecónomo General, el P. Graziano Sala scj fue confirmado para un tercer mandato.
El P. Stervin Selvadass scj fue confirmado como primer Consejero y coordinador para la formación.
Como segundo Consejero y coordinador para la cooperación misionera el P. John Chan Kunu scj.
A todos ellos va nuestro agradecimiento y nuestras oraciones.
Que el Señor, que los ha elegido para dirigir la Congregación, sea su apoyo y fuerza. Que el Espíritu Santo les ilumine y guíe.
Que la mirada atenta de Nuestra Señora de Betharram sea su consuelo y la continua intercesión de San Miguel Garicoits, nuestro Padre, les acompañe.
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